Meditación psicológica

Todos los sistemas de Meditación son usados de forma parcial por muchas organizaciones y meditadores pero todas ellas tienen deficiencias. Lo ideal sería articular un método con todas ellas para que se induzca la Meditación más fácilmente.

Con todas estas prácticas podemos llegar a la Meditación y una vez alcanzado el mecanismo, no es necesario seguir realizándolas, ya que seremos capaces de entrar en meditación directamente.

Sabiendo todo esto vamos a realizar una Meditación guiada tipo. Vamos a usar un método combinado de varias técnicas para crear un sistema capaz de hacernos llegar más fácilmente al estado de Meditación. Lo denominaremos Meditación Psicológica. Consiste en cuatro etapas, donde la meditación propiamente dicha es la última de ellas:

Nos sentamos en una de las posturas de meditación, preferiblemente Padmasana o Siddhasana.

Primera parte:

Nos relajamos profundamente durante unos minutos. Cuando notamos que han desaparecido las tensiones pasamos al siguiente paso. Si esto no ocurre, permaneceremos aquí hasta conseguirlo. No debemos tener prisa en llegar a la segunda parte.

Segunda parte: 

Hacemos desaparecer nuestro cuerpo de nuestra mente. Para ello usamos una visualización. Podemos escoger cualquiera de las existentes en el mercado. Lo importante es conseguir que nuestro cuerpo deje de estar presente para nosotros y que no nos moleste. Aquí vamos a dejar una bastante fácil como muestra:

• Visualizamos una pequeña llama en el centro de nuestro pecho, en nuestro interior… Vemos como la llama comienza a expandirse hasta ocupar todo nuestro tórax… La llama sigue aumentando de tamaño inundando todo nuestro abdomen… Continúa su expansión llenando los brazos y piernas… Finalmente ocupa toda la cabeza… Nuestro cuerpo es una llama envuelto por nuestra piel… La llama atraviesa la piel quemándola y la llama se queda libre… Esa llama comienza a disminuir de tamaño hasta que finalmente desaparece… Nos queda sólo la sensación de nuestro pensamiento, pero sin soporte físico. No existe el cuerpo.

No pasaremos a la tercera fase hasta tener ésta asimilada correctamente.

Tercera parte: 

Frenamos nuestros pensamientos hasta que no quede ninguno:

• Observamos nuestros pensamientos y encontramos una inmensa cantidad de ideas que surgen en cada momento... Vemos cómo se entrelazan unos con otros… Dejamos de observarlos para intervenir activamente… Lo primero que tenemos que hacer es no permitir que unos pensamientos se unan a otros, que es la forma normal de pensamiento… Una vez que están individualizados, dejamos que pasen delante de nosotros sin detenernos en ellos… Los pensamientos cada vez van más lentos… Seguimos sin detenernos en ellos… Fluyen cada vez más lentos y dejan de surgir pensamientos nuevos… Finalmente no queda ningún pensamiento. Hemos conseguido frenar nuestra mente.

Cuarta parte: 

Entramos en el estado de meditación, donde cambia nuestra forma de pensamiento del consciente al supraconsciente. Nos liberamos de todos los controles. Este último paso no se hace, se da cuando todo lo anterior esta conseguido.